CREACIÓN COLECTIVA

CREACIÓN COLECTIVA
La "creación colectiva" no es un invento moderno ni una moda, con metodologías diferentes ha existido desde que hay teatro. Para realizar una creación colectiva los actores escogían un argumento (los argumentos de la narrativa, en Italia por ejemplo, abundaban en truculentas intrigas amorosas) y a partir del argumento elaboraban un "canovaccio", algo como lo que hoy, en lenguaje cinematográfico, conocemos como "guión". Este guión no era la simple organización en acciones de las intrigas del cuento, era más que ello la libertad de representar a viva voz los amoríos, problemas, chismes de lo que en el momento vivían.
                El profesionalismo del actor consistía en que "sabe secundar aquellos que lo acompañan en el escenario, sabe, en otros términos, acoplar tan perfectamente sus palabras con sus acciones y ambas con las palabras y las acciones de sus compañeros, que logra introducirse intempestivamente, en la línea de acción del otro, haciendo lo que el otro le solicita, con tanta precisión que todo el mundo crea que se trata de algo preparado",  Si tenemos en cuenta que réplicas y movimientos eran improvisados, comprendemos toda la complejidad y riqueza del oficio.